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La semana pasada acudió a la Subdelegación del Gobierno en Zamora la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Morales del rey, para denunciar la actuación de la Alcaldesa popular del municipio, Ana Riesco, a la que acusó de no reflejar en las actas de los plenos lo que en ellos ocurre (competencia que corresponde, según la Ley, al Secretario de la Corporación), así como de insultar a los concejales socialistas. El Subdelegado del Gobierno, haciendo un claro uso partidista de su cargo, aseguró a la concejala opositora que pediría un informe jurídico al Abogado del Estado. Esto demuestra una intolerable intromisión del Subdelegado en la autonomía local, recogida en la Constitución. El Subdelegado hace flaco favor a su partido, lo que deberia haberles dicho es que cuando un cuidadano siente lesionados sus derechos debe acudir a los tribunales de Justicia para la restitución de los mismos. Lo que es intolerable es que el Subdelegado use fondos públicos y funcionarios públicos para asesorar a sus Concejales, si asi son las cosas deberian hacerlo todos los Alcaldes y concejales de la provincia. Si el PSOE quiere asesorarse que lo pague de su bolsillo.